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DISCRIMINADA EN OKLAHOMA

Estos son los verdaderos protagonistas de la historia

Historias reales presenta un breve resumen de: DISCRIMINADA EN OKLAHOMA.

Saludos cordiales de su fiel amiga
Angélica Mata, es un honor continuar escribiendo para mis fieles lectores esta serie de historias que nos dejan grandes enseñanzas.
Millones de gracias por todo el apoyo recibido y mientras ustedes lo deseen: historias reales existirá.

El relato que hoy les presento ocurrió en EE.UU en el año 1995 en la ciudad de Tulsa Oklahoma. Antes de iniciar esta historia Mario y Zoila Girón envían un cordial y muy sincero saludo a dos personajes muy importantes en esta historia VELMA Y

WADE HARRISON agradeciéndoles al mismo tiempo con toda su alma todo el empeño y su gran colaboración junto al prestigioso abogado JEFF MARTIN para resolver dicho caso.
Para JEFF MARTIN el único abogado honesto que encontraron, también le envían su más profundo agradecimiento deseándoles a estos tres personajes que DIOS nuestro padre los llene de bendiciones y que sigan triunfando en todo lo que hacen.

Mario y Zoila Girón un matrimonio muy joven con barias cosas en común, ambos eran divorciados, guapos y muy atractivos, cada uno tenía dos hijos de sus relaciones anteriores, el destino los unió en Santa Ana california, posteriormente viajaron a Tulsa Oklahoma para radicar por tiempo indefinido; Todo marchaba muy bien, encontraron los mejores amigos que jamás antes habían conocido, tuvieron dos hermosos hijos un niño y una niña a los cuales nombraron: Mario Ariel y Angélica Ruby, sin imaginar que su felicidad estaba programada por muy poco tiempo, debido a un descuido de Zoila quien dejó una plancha conectada, Mario Ariel con tan solo un año y dos meses de edad sufrió una quemadura en el pié, su madre creyendo que se trataba de algo muy simple que se podía curar en casa no lo llevó pronto al médico, solo recurrió a una farmacia, compró lo necesario y le brindó los primeros auxilios.

Tres días después Zoila decide acudir a una clínica para asegurarse que su pequeño estuviese bien, pero se llevó una enorme sorpresa cuando el médico le envió la policía para que le quitasen a su amado hijo, ella había notado algo muy raro en el doctor, en primer lugar la encerró por un periodo de dos horas en un cuarto y la estuvo observando a través de un monitor pero lo que más la sorprendió fue que aquel medico racista no movió un solo dedo para curar al pequeño Mario Ariel, él se dedicó solo a investigar si se trataba de un caso de abuso infantil, antes de salir de la clínica, Zoila preguntó al médico lo siguiente: ¿Puedo saber el motivo por el cual usted me encerró y monitorio todo este tiempo y ahora me envía a mi casa sin haberle prestado atención medica a mi pequeño? y el médico respondió: lo del encierro y la monitoreada es para ver si tu hijo te tiene miedo y de ser así todo indicaría que tú lo quemaste, eso es todo. La joven desesperada le respondió: que horror, ¿como una madre va a querer quemar a su propio hijo?

Aquella madre angustiada no lograba entender la razón por la cual dicho medico no fue capaz de brindarle ningún tipo de curación a su bebe.
Confundida y muy triste emprendió su retorno a casa, lo que nunca imaginó fue que al llegar la estaba esperando un policía para investigarla.

Al día siguiente el DHS invadió su hogar acompañado de 4 radio patrullas para arrebatarle de los brazos al pequeño Mario Ariel sin darle ninguna explicación, dejándole una nota para que se presentase a la corte juvenil, Zoila acudió a la cita creyendo que era para entregarle a su bebe pero sucedió todo lo contrario, la cita fue solo para obligarla a entregar a su pequeña Angélica Ruby de solo dos meses de edad. Aquella madre angustiada al escuchar la orden del juez quedó al borde de un ataque cardiaco y preguntó lo siguiente: ¿y qué ocurre si me niego? el juez contestó: queda arrestada en este mismo momento. Minutos después le arrebataron de sus manos a su niña recién nacida.

Zoila corre en busca de un buen abogado, Dios nuestro padre del cielo le envió un ángel que la ayudó sin cobrarle ni un solo centavo durante un periodo de 18 meses, ese ángel se llama: JEFF MARTIN un prestigioso abogado con un enorme corazón de oro dispuesto a ganar el caso y lo logró, los niños fueron devueltos a sus padres bajo una estricta vigilancia que duraría un año, después el estado les devolvería la custodia, Zoila repitió el error, ella volvió a descuidarse con la plancha y esta vez la víctima fue la pequeña Angélica Ruby, es ahora cuando el estado de Oklahoma #1 en proteger a los niños, no tuvo piedad de ella, la señaló como una persona muy negligente para cuidar a sus pequeños hijos y tomó posesión de ellos dándolos en adopción sin su consentimiento aprovechándose de la intervención de inmigración quienes la obligaron a abandonar el país por voluntad propia con la promesa de darle una residencia al cumplir el plazo que debía permanecer en su país de origen.

Tres meses después Zoila regresó a los EE.UU. e hizo lo imposible por recuperar a sus hijos pero todo fue en vano, comenzó a contratar los mejores abogados adquiriendo enormes deudas que hasta la fecha no logra terminar de pagar, barios abogados corrutos sin corazón se aprovecharon de su triste situación y le pidieron fuertes cantidades, después se escondían y al año aparecían diciéndole que simplemente no se podía hacer nada.

Mario por su parte hizo contratos de 30,000.00 dólares con abogados de la ciudad de Oklahoma y estos le prometieron resolver su caso y regresarle sus hijos, pero todos, absolutamente todos sus esfuerzos fueron en vano, tanto el cómo su esposa fueron víctimas de un fiscal y un doctor racistas que afirmaron que esto fue un caso de abuso infantil y no un accidente.
El joven matrimonio que en un abrir y serrar de ojos les cambió la vida sufrieron los peores acosos e insultos por parte del estado, Zoila cayó en una fuerte depresión de la cual aún no se repone.

Por el solo hecho de haber cruzado la frontera de ilegal ella fue señalada como sospechosa de haber quemado el pié de sus pequeños.

Constantemente citaban a la pareja por separado para interrogarlos, a Mario le preguntaban: ¿verdad que tú esposa quemó los niños y tú no hiciste nada? Con Zoila hacían exactamente lo mismo.

No cabe duda que para los americanos el solo hecho de ser ilegal nos convierte en delincuentes.

Esta historia aún no llega a su fin prometo compartir con todos ustedes su desenlace en cuanto reciba nuevos informes, como les dije en el principio esto solo es un breve resumen de una larga y muy triste historia real.

Y como siempre los dejo en compañía del espíritu santo, les envió mi corazón que está hecho de oro junto a un cordial saludo para sus hermosas familias.

De nuevo millones de gracias por todo su apoyo mis queridos consentidos y fieles lectores.

Seguiré agradecida por todos sus comentarios a www.elsuperior.com
y a mi correo personal angelicamata2000@hotmail.com

 


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